Olympus Pen-f M.Zuiko 60 macro F(3.5 1/1250 Iso 200 |
La fotografía macro, también conocida como fotografía de aproximación, es la captura de sujetos cuyo tamaño esta entre 1 y 10 veces el tamaño del sensor de la cámara, aunque dicho en modo coloquial, sería la captura de aquellos sujetos cuyo tamaño no supere la palma de nuestra mano.
Nikon D300s Nikon 105 macro f/13 1/60 Iso 320 |
Nilon D300s Nikon 105 macro f/18 1/80 Iso 400 |
También nos podemos ayudar de “lentes de aproximación”, que se colocan en la frontal del objetivo, son baratas, no pesan, no es necesario desmontar el objetivo para su uso, tienen un peso despreciable y un precio razonable, manteniendo en todo momento los automatismos de la propia cámara aunque si no son de calidad, suelen producir bastantes aberraciones cromáticas. Viene a ser como colocarle una lupa de aumento al propio objetivo.
Otros elementos utilizados son los Anillos de inversión, cuya función es colocar el objetivo al revés, de tal manera que la parte frontal queda sujeta a la propia cámara. Con ello perdemos todos los automatismos propios de la cámara, tendiendo que utilizar objetivos que se pueda diafragmar de forma manual. Cuanto más angular es el objetivo utilizado, mayor aumento conseguimos y esto es porque un objetivo angular está preparado para que algo muy grande (un paisaje por ejemplo) se comprima al tamaño de nuestro sensor con lo que, al utilizarlo al revés, cualquier elemento situado en el frontal, se amplía al llegar al sensor.
Para fotografías todavía más extremas
o que queramos aumentar entre 5 y 10 autos el elemento a fotografiar, podemos
encontrar los fuelles, que colocados entre la cámara y el objetivo, permitiendo
separar la distancia entre ambos. En contra, son caros, delicados, pesados y
muy difícil de utilizar fuera de estudio y más con insectos vivos.
Fuelle macrofotografia |
Colocación del fuelle entre el cuerpo de
la cámara y el objetivo
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Volviendo otra vez a los objetivos específicos de la modalidad (objetivos macro), por la facilidad de uso, cabe reseñar que, cuanto más larga sea la focal, nos permitirá acercarnos menos al sujeto, asi por ejemplo, las focales entre 30mm y 60 mm son ideales para plantas y sujetos inertes, mientras que focales entre 150mm y 200mm nos permitirán capturar sujetos vivos, al mantener una distancia de seguridad con estos, que evita que se asusten, además de que capturan menos proporción de fondo, lo que nos ayudara a evitar fondos que nos distraigan. En contra, tenemos que los precios son mucho más elevados y su peso, se nota al final de una jornada fotográfica, incluso para cargarlo de diario en la mochila. Entre los más angulares y estos últimos, podemos adquirir objetivos con focales entre 90 y 105mm que cumplen con las expectativas de la mayoría de los fotógrafos, con un peso y un precio contenido.
Con estos objetivos, podemos
combinarlos con lentes de aproximación y con anillo de extensión para conseguir
mayor ampliación.
Cómo todo lo que brilla no es oro, con
estas aproximaciones, la profundidad de campo es mínima o sea que, la zona
nítida por delante y por detrás del punto de enfoque, disminuye cuanto más
abierto es el diafragma (aquí también intervienen otros factores como el tamaño
del sensor, que cuanto más pequeño es, mas zona de nitidez disponemos para un
mismo diafragma).
Asi,
cuando trabajamos en el “campo”
nos encontramos con adversidades como el viento, el enemigo número 1 de
los macrofotógrafos, ya que cualquier mínimo movimiento se magnifica, lo que
nos obliga a disparar a velocidades elevadas, teniendo que abrir diafragma para
compensar la exposición y sin hacer un uso del Iso con valores elevados, para evitar
el “ruido” causado al aumentar la sensibilidad de los sensores. Incluso el
movimiento de nuestro pulso, jugará en nuestra contra, con lo que es
aconsejable utilizar trípodes o saquitos de arena (la mayoría de sujetos esta a ras de suelo),
que nos ayudaran a estabilizar la cámara, no estando de mas el hacer uso de un
cable disparador o control remoto para evitar las vibraciones al pulsar el
disparador. El uso de pinzas específicas para sujetar sin dañar, sobre todo la
flor o la rama sobre la que esta posado, nos ayudará a conseguir mejores
resultados.
También nos podemos ayudar de flashes
para conseguir compensar las zonas de sombras ya que la luz natural no siempre
es la más apropiada o congelar la imagen. También podemos apoyarnos de
reflectores para aclarar sombras o difusores para suavizar la luz.
Esquema
de luz con flashes y sujeción del
sujeto mediante una pinza para evitar su movimiento
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Olympus OM-D E-M5 MkII M.Zuiko 60 macro f/2.8 1/125 Iso 1600 |
Olympus Pen-f M.Zuiko 60 macro f/6.3 1/400 Iso 200 |
Mis parámetros: utilizo
preferentemente el modo manual para fijar la velocidad, diafragma e iso
adecuados a la luz existen, aunque en ocasiones, si esta es muy cambiante,
también utilizo la prioridad a la velocidad fijándola en 1/250 para que, en
caso de tener necesidad de utilizar el flash, poder hacer uso del mismo ya que
es la velocidad máxima de sincronización. El flash lo utilizo principalmente
para suavizar sombras. El Balance de Blancos me lo resuelve bastante bien la
cámara por lo que lo dejo en manual. Si hay sombra, suelo poner el ISO a 400 o
incluso a 800 aunque cada uno tiene que conocer el límite de su cámara.
Mi equipo: por lo general, para
fotografía macro, utilizo la Olympus Pen-f en la que tengo configurado un banco
específico para macro, 20 mpx de resolución y con 81 puntos de enfoque me
resuelven cualquier problema para enfocar en cualquier parte de la pantalla.
Por lo general enfoco a través del visor electrónico, donde dispongo de toda la
información necesaria, como si se tratara de la pantalla trasera, incluso para
comprobar los resultados. El aviso de altas luces y sobras junto con un
histograma en directo, me ayudan a la hora de fijar los parámetros, además de
que en el propio visor, estoy viendo como quedara de expuesta la fotografía. En
ocasiones y para tomas a ras de suelo, me aprovecho de que la pantalla es
abatible y desde la propia pantalla puedo, al ser digital, enfocar y disparar,
sin necesidad de echarme al suelo, dando muy buenos resultados.
Cómo objetivo, utilizo principalmente
el M. Zuiko 60 f2.8 macro (120mm para FF). Un objetivo pequeño y muy versátil,
con gran nitidez y que a veces he utilizado incluso para retratos. También
utilizo el M. Zuiko 40-150 f2.8 junto
con el duplicador MC-14 1.4x, ideal para evitar acercarte a insectos, que,
aunque algo más grande, tampoco tiene un peso excesivo para ser un f2.8
Olympus Pen-f M.Zuiko 40-150 f2.8 f/4 1/250 Iso 400 |
Olympus Pen-f M.Zuiko 60 macro f/4 1/160 Iso 200 |
El Flash que utilizo, es el Olympus
FL-14, puesto sobre la zapata de la cámara, me resulta útil para levantar
sombras
Las imágenes las edito en Lightroom
por la facilitad tanto de visualizarlas, como para seleccionarlas y editarlas,
exportando las mismas en jpg a baja resolución 1200 px para el lado más largo y
72ppp
Olympus Pen-f M.Zuiko 12-50 macro F/6 1/250 Iso 400 |
¿A que esperas para coger la cámara y
salir al campo?...Incluso, si tienes plantas en la terraza en el jardín, a
través del macro, podrás observar un diminuto mundo que nos rodea.
A practicarrrr
ResponderEliminarSi, a practicar, que ahora en estas fechas hay muchos bichos para inmortalizar.
ResponderEliminarEva
Wowww!! Me encanta el post, Javi!! Y las fotos son espectaculares!!! En España se han quedado mis objetivos macro, cuando vuelva me pongo a estudiarlos, jeje!! Besitos
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